Desde luego, la combinación de color morado y amarillo es un tanto osada (recuerda demasiado a los colores de Los Ángeles Lakers, quizás), pero dependiendo el estilo de la pareja, puede funcionar. Si no os gustan estos colores, pensad en otro (por ejemplo, turquesa y marrón) y quedaos con la composición de los centros de mesa, los detalles de los tulipanes, las velas, los detalles…